Comparto este árbol de frutos prohibidos para que se sirva de él quien guste.
Proximamente en colores y otras versiones.
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y las palabras, de quién son?
Las contenidas en este blog no son mis palabras. Acaso apenas un nuevo proceso de siembra sobre las palabras que tiene el mundo y que alguna vez escuché o leí en algún lado. Como las palabras no son de nadie y además se las lleva el viento, cada tanto dejo algunas acá para que estén un poco más resguardadas (¿?...no se qué es peor) y para que alguien más, si quiere, las coseche, las aprehenda y las vuelva a sembrar: con otra forma, enriquecidas y principalmente LIBRES.
3 comentarios:
Che, me gustan!!! si a vos te parece, se las voy a mostrar a la directora de la revista... nosotros hacemos tapa a dos colores: con el nombre en un color y el lomo y la contratapa de ese mismo color. La primera fue con rojo, la segunda con un verde limón (quedó medio pavo, no te la mostré, me parece). En el caso de la primera imagen, ya tiene dos colores, no?
Obvio que si le gustara (o gustase) iría tu nombre como "crédito".
Besos y gracias!!!
Buenísimo, si le gusta lo puedo pasar al color que elijan, con eso no hay problema, es un minuto. Lo del nombre, yo prefiero que no esté... en todo caso un seudónimo... no sé. (Es un problema de identidad! jajaja)
Un beso!
Bueno, Aldonza Lorenzo, en todo caso, jaja!!!! Vamos a esperar a ver qué dice esta mujer, Balestra, que, como es funcionaria de la municipalidad de Rosario, estimo estará muuuuuuuy ocupada. En febrero tendremos noticias.
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